El Área de Movilidad cuenta con un sistema centralizado con una amplia red de puntos de medida que, distribuidos por la red viaria principal, aportan información sobre el número de vehículos que circulan y la densidad del tráfico en cada momento. Con estos datos se calculan los planes de tráfico y se realiza la selección horaria de los mismos. 

Un Plan de Tráfico consiste en el conjunto de parámetros que definen el comportamiento de un conjunto de cruces semaforizados, tanto de los tiempos de cada intersección como del sincronismo entre intersecciones, al objeto de favorecer la circulación de los flujos mayoritarios. Se crean tantos planes como son necesarios para dar respuesta a los diferentes movimientos dentro de la red viaria. El comportamiento del tráfico varía en función de la hora del día, del tipo de día y de la estación del año, por lo que para cada una de las situaciones se dispone de un Plan de Tráfico específico. Los Planes de Tráfico son objeto de evaluaciones y ajustes periódicos a fin de mantenerlos actualizados y de que ofrezcan la mejor respuesta posible.